lunes, 12 de marzo de 2012

19 DEL 3.

   19 del 3. Ese es el título de esta nueva entrada en mi blog. Y mis queridos lectores se preguntarán ¿ésto qué es, un autoindefinido?. Eso, los que no son valencianos (que vaya usted a saber por qué, pero me consta que los hay, oigan....). Porque para los valencianos, son unos números importantes. 19 del 3.

   Es una fecha. Día 19 del 3er mes. 19 de Marzo. San José. Día grande de la fiesta de las Fallas.

   Lo que nos lleva a mi pasión, a mi modo de vida, a la mayor parte de mi tiempo, a la principal causa de mis risas y de mis llantos, ..... en definitiva, a lo que yo soy: FALLAS.

   Los que me conocéis, seguro que me habréis oido alguna vez la frase que empleo sobre todo de Septiembre a Marzo: "Cuando me renueve el DNI, voy a poner como dirección la del Casal, porque paso más tiempo en él que en mi casa". Ésto, que no deja de ser una frase cariñosa que utilizo en tono jocoso, no hace sino expresar una realidad. En esta, nuestra tierra de Valencia, existen tres tipos de personas: los valencianos, las valencianas.... y los FALLEROS.

   Los falleros somos una especie de locos que no contentos con el trabajo (o la falta de él), la casa, la familia, la política (uffff....), los amigos, la Comparsa Mora, ..... tenemos la necesidad de vivir falla, respirar falla y soñar falla. Nos pasamos todo una año bajando a las Directivas todas las semanas, comprando y vendiendo loterías, para acabar dedicando todas las noches de la semana cuando hay que hacer la Cruz de Mayo, el Belén Monumental, preparar el Teatro y la Decoración de la Presentación, la Presentación de las Maquetas, la Cabalgata del Ninot, .....etc, etc, etc...hasta llegar a la ansiada Semana Fallera. Conclusión: lo de que las fallas somos grandes familias, no es una frase hecha. Paso más horas con el Presidente de mi Falla, que con mi madre.

   Hace tiempo que prometí que escribiría un post dedicado a LA FIESTA FALLERA, y.....ha llegado el momento.

   Llevo muchos días recopilando información para aportar documentos que certifiquen la HISTORIA de las fallas que os iba a contar. Pero ha llegado el momento de escribir.....y me he dado cuenta de que no puedo hablar de datos, fechas, de cómos o por qués. Como os he dicho, para mi, las fallas son un sentimiento, y no se puede hablar de sentimientos con datos e historia, sino poniendo el corazón encima de la mesa y dejando que él hable por ti.

   Muchas veces hemos oído que la falla es una gran familia, pero lejos de ser una simple frase hecha, es reflejo de una gran verdad (al menos para los falleros de corazón.....que como en todos los sitios, alguno habrá que esté sólo por la fiesta........). La mayor parte de nosotros fuimos apuntados a nuestra Comisión nada más nacer o siendo aún muy niños, de modo que, literalmente, nuestras fallas nos han visto crecer. Llegamos a ellas siendo jóvenes, inocentes e inexpertos y la falla nos ayuda a fraguar nuestro espíritu definitivo. Una buena parte del carácter de los valencianos, se lo debemos a las fallas.

   Mi Falla, a mí me ha enseñado desde niña a amar a mi tierra, a aprender su historia, a respetar a mis antepasados y a aprender de sus penas y sus glorias. Me ha enseñado que las tradiciones son una parte importante de nosotros y que hay que aprenderlas y enseñárselas a nuestros niños. Me ha enseñado a trabajar duro, en ocasiones sola, las más de las veces en equipo, para preparar actividades, concursos, actos falleros, actos culturales, ....etc. Me ha enseñado que lo importante es el esfuerzo y la ilusión que le pones a lo que haces, porque ellos te llevan a la satisfacción. Me ha enseñado a competir de manera sana y con ella he aprendido a ganar y a perder, sin que el premio sea lo más importante. Me ha enseñado a asumir responsabilidades, a coordinar un grupo de trabajo o la suficiente seguridad en mi misma como para que actos importantes para cientos de personas dependan de mi. Me ha enseñado mi lengua paterna, mis autores y mi literatura, más allá del colegio. He aprendido de los mayores, y ahora empiezo a enseñar a los pequeños. Y afortunadamente, no me ha enseñado sólo cosas falleras. Me ha enseñado otras tradiciones, su historia y sus métodos, como la Cruz de Mayo, la construcción de Belenes Monumentales, la celebración del Día de nuestra Comunidad, la celebración de la festividad de San Juan,...etc.

   Pero sobre todo, algo muy importante para mi es que SIEMPRE ha estado ahí. Soy parte de ella en la misma medida que ella es parte de mi.

   Y mucha de la gente que la forma es verdaderamente parte de mi vida. Cuando eres pequeño, no importa si pierdes de vista a tus padres. En la falla hay decenas de personas con las que tienes casi la misma confianza que con ellos. Estén allí, o no, tu te sientes igual de segura. Y cuando te haces mayor, la sensación aumenta. Sabes que puedes pedirles cualquier cosa. Siempre estarán ahí para ti. No sé si a los demás esto les parecerá mucho o poco, pero para mi, es algo muy grande.

   Para mi, mi Falla ha sido, y sigue siendo, una de las mejores escuelas de vida. Ha sido, y sigue siendo, una verdadera familia para mi.  Ha sido, y sigue siendo, el reflejo de lo que soy: VALENCIANA y FALLERA.

   Y no hay orgullo más grande en el mundo que poder decir bien alto que SOY parte de esa BENDICIÓN.